Cómo y cuándo PODAR tus ROSALES (según la variedad)

Poda de rosales

Podar tus rosales es algo necesario.

Pero tienes que hacerlo BIEN.

Y ojo, que se digo esto por una razón:

La poda del rosal es muy beneficiosa, pero solo si está hecha como es debido. 🙂

Así que en esta guía de Gracias Naturaleza te cuento cómo y cuándo hacerlo, para cada tipo de rosal. Porque existen varios tipos de rosal y cada uno tiene su poda especial.

Seguro que estás deseando comenzar, así que al lío.

¿Por qué conviene podar los rosales? Beneficios principales

Supongo que ya sabes que la poda es una tarea imprescindible en un rosal si quieres que siga dando abundantes y hermosas rosas.

Así es.

De una poda correcta depende que la siguiente temporada vuelva a florecer con alegría.

Además, la poda servirá para mantener a la planta sana y vigorosa.

Y no, no solo consiste en retirar las rosas secas…

Poda de rosales - retirando flores secas y marchitas del arbusto

Sea como sea, imagino que estarás de acuerdo conmigo cuando digo que todas estas razones (floración y salud) son bastante importantes.

De hecho, son similares a las que te cuento en mis guías sobre podar palmeras o podar cítricos como un naranjo.

Pero la pregunta es…

¿Cuándo podar los rosales exactamente?

El mejor momento para podar un rosal está parcialmente determinado por su edad. A continuación te explico algunas particularidades.

Rosal joven

Durante su primer año de vida no debes podar el rosal. Ese primer año el rosal es muy delicado y debe desarrollar un buen sistema de raíces (lo que técnicamente se conoce como sistema radicular). Así que es mejor que no le cortes ninguna rama.

Poda de febrero, en realidad de marzo

Se le llama poda de febrero pero suele hacerse en marzo para evitar el peligro de las heladas tardías.

Es la época habitual para podar los rosales (más allá del primer año).

Eso sí, cada tipo o variedad de rosal necesita una poda específica. Yo te explicaré cómo debes podar cada uno un poco más adelante en esta guía.

Poda de final de verano

En algunos tipos de rosales, siempre que florezcan solo en verano, resulta beneficioso darles una poda a final del verano, en septiembre o en octubre.

Consiste básicamente en recortar a un tercio las ramas que ya han dado flores para estimular el crecimiento de nuevas ramas.

Si tu rosal florece en otoño, realiza esta faena en la poda de febrero.

¿Cómo podar los rosales? Detalles para cada variedad

Cada tipo de rosal tiene sus propias reglas de poda, pero antes de nada, tengo algunas recomendaciones que valen para todos:

  1. Haz cortes limpios con herramientas afiladas y desinfectadas.
  2. Cuando recortes una rama que ya ha dado sus rosas, haz el corte por encima de una yema orientada hacia fuera, a 0,5 cm aproximadamente.
  3. Corta en diagonal con un ángulo de 45 º.
  4. La inclinación del corte debe ir en orientación contraria al brote para que no le escurra el agua.

En general se trata de eliminar las ramas muertas, dañadas, enfermas o envejecidas, y las que crecen hacia el interior del rosal o enmarañadas con otras.

Corte diagonal de una rosa seca para la poda con tijeras de jardinería

Te cuento un truco:

Para comprobar si una rama está seca, hazle un corte.

Si la superficie del corte no es de color blanco, la rama está seca.

También te irá bien eliminar los chupones porque «chupan mucho» y no dan rosas.

Sobre los chupones del rosal

Los chupones son unas ramas muy vigorosas, que crecen de forma casi vertical desde el patrón o portainjerto en la parte inferior del rosal, muchas veces desde las raíces.

Pero debes tener cuidado…

Los chupones se pueden confundir con los brotes basales, que también brotan de muy abajo pero sí que salen del rosal.

Los puedes distinguir en que los brotes basales tienen las mismas características que el resto de ramas del rosal, mientras que los chupones suelen ser más espinosos o tener las hojas más pequeñas o de distinto color.

Ahora sí, vamos a ver en detalle cómo debes podar cada tipo de rosal.

Poda de los rosales híbrido de té

Poda de rosales - Variedad híbrido de té

Es el tipo con más miembros, miles de variedades de todos los colores.

Son los típicos rosales, de 50 cm a 1 m de altura, con grandes rosas que salen al final de las ramas de un capullo alargado.

Son variedades que necesitan mucho sol y muchas de ellas reflorecen durante buena parte del año.

Con la poda debes procurar darles una forma de vaso con un máximo de 6 ramas principales, mejor 4 o 5, bien distribuidas y el interior algo despejado.

Para podar un rosal híbrido de té realiza las siguientes acciones:

  1. Recorta las ramas que ya han dado flores dejando unas 5 o 6 yemas.
  2. Elimina todas las ramas secas, dañadas o con signos de enfermedad.
  3. Corta las ramas que crezcan hacia el interior.
  4. Corta desde la base todas las ramas que tengan más de 4 años.
  5. Elimina todos los chupones que hayan brotado del patrón.
  6. Si tiene más de un capullo en el extremo de la rama, deja solo uno para que la rosa sea más grande.

Poda de los rosales floribunda

Poda de rosales - Variedad floribunda

Este tipo también es muy numeroso y conocido. Se plantan en grupos para formar macizos y borduras, con variedades muy apreciadas como Edelweiss o Goldmarie.

Son rosales compactos de unos 0,5 m de altura con rosas que se agrupan en racimos, a veces con más de 20 flores. Suelen florecer varias veces cada año.

La poda de los rosales floribunda debe ser más ligera que la de los híbridos de té.

Estas son las acciones que tienes que realizar en la poda de un floribunda:

  1. Recorta la mitad de las ramas del año anterior.
  2. Elimina todas las ramas secas, dañadas o enfermas.
  3. Elimina todos los chupones.
  4. Si un tallo está envejecido, córtalo a pocos centímetros del suelo para que rebrote de nuevo.

Poda de rosales polyantha

Poda de rosales - Variedad polyantha

Son rosales pequeños, compactos y espesos, con una muy abundante producción de rosas de pequeño tamaño formando ramilletes de hasta 15 flores.

Se utilizan con los mismos fines que los floribunda y su poda es similar.

Poda de rosales grandiflora

Poda de rosales de tipo grandiflora en primavera o verano

Los rosales grandiflora son un híbrido entre los rosales híbridos de té y los floribunda. Tienen el porte erguido alcanzando entre 80 cm y 1,5 m de altura.

Dan flores en grupos como las floribunda, pero con rosas más grandes y menos numerosas.

La poda de los rosales grandiflora es parecida a la de los híbridos de té pero dejando solo 3 yemas (unos 20 cm).

Poda de rosales arbustivos

Cómo y cuándo podar un rosal arbustivo, como la rosa Elmshorn e Iceberg

Los rosales arbustivos tienen gruesos tallos que forman grandes matas de 1,5 a 2,5 metros de altura, con un ancho similar. La mayoría de las variedades florecen varias veces cada año.

Algunas de las más apreciadas son la rosa Elmshorn y la Iceberg.

Los rosales arbustivos no necesitan una poda con tanta regularidad, ni demasiado severa.

Simplemente debes ir eliminando los tallos muertos y cortando los viejos desde la base. También puedes eliminar algún tallo que se entrecruce con otro para que quede más limpio.

Si es una variedad refloreciente, retira las flores conforme se vayan marchitando.

Poda de rosales trepadores

Poda de rosales trepadores o sarmentosos

Los rosales trepadores tienen tallos fuertes y leñosos que les permiten subir por muros y pérgolas, pudiendo alcanzar varios metros de altura. Los hay reflorecientes y también de una solo floración anual.

Algunas variedades dan rosas grandes y otras rosas más pequeñas agrupadas en ramilletes, aunque todas suelen ser muy fragantes.

Aparte, los rosales sarmentosos son un tipo muy parecido al de los trepadores pero con los tallos más largos y flexibles. Suelen dar un única floración en verano.

Sigue estos pasos para podar los rosales trepadores y sarmentosos:

  1. Elimina las ramas secas, rotas, dañadas o enfermas.
  2. Elimina las ramas débiles.
  3. Reduce el número de vástagos que brotan del suelo si hay demasiados y no permiten una buena ventilación.
  4. Elimina tallos viejos de más de 5 años para favorecer el crecimiento de nuevos vástagos.
  5. Recorta las ramas laterales, dejándolas con 2 o 3 yemas.

Poda de rosales tapizantes

Rosal tapizante variedad The fairy, necesita una poda ligera

Los rosales tapizantes son los que crecen de forma rastrera por el suelo. Tienen un follaje denso y resistente y dan abundantes rosas. Se suelen plantar en rocallas o para cubrir taludes (si no sabes lo que es una rocalla, hazte un favor y échale un ojo a mi artículo sobre qué es y cómo construir una rocalla).

Algunas variedades muy apreciadas de este tipo son The fairy y Romantic Roadrunner.

La poda de los rosales tapizantes debe ser ligera. Elimina solo las ramas en mal estado.

Puedes recortar las ramas que muestran un crecimiento vertical, para lograr un aspecto uniforme de tapiz cubresuelo.

Poda de rosales mini

Poda de un rosal mini en maceta

Son los rosales de menor tamaño, no suelen sobrepasar los 40 cm de altura, con hojas muy pequeñas. Sus rosas también son muy pequeñas y suelen salir en ramilletes.

La mayoría de las variedades reflorecen varias veces al año.

Se utilizan para espacios reducidos, borduras y para cultivo en macetas.

Tienes que dejar de 3 a 6 ramas principales, eliminando las más viejas para que se vaya renovando. Recorta las ramas dejándolas con unos 20 cm de longitud. Mantén el interior despejado.

Herramientas para la poda de rosales

Para podar un rosal no necesitas un gran equipo de herramientas. Solo la herramienta adecuada según el grosor de las ramas que tengas que cortar.

Y los medios de protección necesarios para no sufrir algún daño.

Estas son las herramientas básicas que puedes necesitar para podar un rosal:

  1. Tijeras bypass: Son las típicas tijeras de poda a una mano. Son ligeras y maniobrables, muy prácticas para cortar ramas finas.
  2. Tijeras de yunque: Son también tijeras a una mano pero con una hoja fija. Tienen más potencia para cortar ramas más gruesas con un corte limpio.
  3. Guantes: Ya sabes que los rosales son muy espinosos. Así que si no quieres llevarte un doloroso pinchazo ponte guantes cada vez que trabajes con los rosales.

Te recuerdo que debes desinfectar las herramientas antes de utilizarlas para no causarles alguna infección. Debes hacerlo también después de terminar con cada rosal antes de empezar con el siguiente.

Resumen, conclusiones y sobre la poda de rosales

Como conclusión, para podar con éxito tus rosales, te dejo estas claves como resumen de la guía:

  1. La poda normal de los rosales se realiza en el mes de marzo, cuando ya no hay riesgo de heladas.
  2. En variedades que solo florecen en verano se puede realizar otra poda en septiembre u octubre.
  3. No podes los rosales durante su primer año de vida.
  4. No confundas los chupones con los brotes basales del rosal.
  5. Cada tipo de rosal tiene sus propias reglas de poda.
  6. Los rosales arbustivos no necesitan podas tan regulares ni estrictas.
  7. Los rosales envejecidos necesitan una poda más severa.

Y hablando de rosales envejecidos…

¿Qué hacer con los rosales que ya están envejecidos?

Si el rosal está envejecido, con poco vigor y escasa floración, debes realizar una poda más severa para revitalizarlo. Elimina todas las ramas secas, estropeadas, enfermas o débiles, y recorta todas las restantes, dejándolas a unos 30 o 40 cm de largo.

Al finalizar la poda…

Cuando termines de podar el rosal debes quitar todas las hierbas alrededor de su base. Cuando esté bien limpio añade una buena capa de compost para que vuelva a rebrotar con energía.

También puedes pulverizar con algún producto como el polisulfuro de calcio para prevenir las infecciones de hongos y el ataque de plagas.

Por otro lado, hay una cosa que me gustaría dejarte muy clara:

¡La poda no lo es todo!

La poda es uno de los cuidados más subestimados en el cultivo de casi todas las plantas. ¡Pero no lo es todo! Hay otros factores esenciales para tener éxito, los cuales te explico en detalle en mi ebook gratis:

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Un abrazo enorme y hasta la próxima,

-Mario Angulo

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